En el período presidencial de 1882 a 1884 el liberal José Eusebio  Otálora, cundinamarqués hijo de padre  Vasco y madre boyacense, nacido en Fómeque Cundinamarca, ocupó la primera magistratura nacional luego del fallecimiento repentino del presidente Zaldúa.

Realizó estudios primarios, secundarios en la capital  colombiana y  luego los universitarios  en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario también en Bogotá.     Residió un tiempo en la población de Guateque, también poco tiempo después fue diputado a  la Asamblea de Boyacá.

Luego ingresó a la Cámara de Representantes, donde ocupó un escaño, fue nombrado representante del estado de Boyacá en la Convención de Rio Negro.

Luego  tuvo un papel destacadísimo en la Cámara de Representantes, cumplido su periodo fue propuesto para la reelección pero declinó este nombramiento.

Como representante diplomático de Colombia estuvo de Cónsul en Italia y  en La Gran Bretaña hasta que llegó la guerra de 1875. Hizo carrera militar llegando hasta el grado de General y fue presidente del estado de Boyacá.

En la presidencia de la república, durante sus dos años de ejercicio, hizo un gobierno progresista y liberal que culminó el 1 de abril de 1884. Durante su mandato impulsó con vigor las comunicaciones terrestres  mediante ampliación de la  infraestructura vial y  logró la  terminación de varias redes de ferrocarriles nacionales que estaban estancadas.

Como pocos, Otálora,  fue consecuente con la política de moderación de Rafael Núñez, los radicales enemigos de Núñez le hicieron falsas acusaciones que luego de investigaciones se pudo demostrar plenamente su inocencia, pero moral y físicamente le ocasionaron la muerte,  

hecho que sucede en la población Tocaima Cundinamarca donde tenía su finca. Poco después y tardía llegó la absolución oficial de su causa.

Fue un presidente liberal que pasó a la historia como ejemplo de ecuanimidad y progreso.